Resumen:
En el libro “El trabajo de las sociedades” Dubet afirma que la sociedad de los sociólogos ya no existe, si es que alguna vez existió. Con esto quiere decir que el paradigma explicativo que construyeron los sociólogos (sobre todo en la tradición de Durkheim y Parsons) sobre el proceso de socialización como internalización de normas y valores hace tiempo que no permite dar cuenta de los problemas de la sociología. El paulatino abandono de este paradigma llevó a la sociología a dejar de ocuparse de los valores como objeto de estudio. Esta ponencia propone una serie de claves teóricas para reflotar el interés por la comprensión de los valores desde la sociología. La primera clave tiene que ver con entender que los valores refieren a la relación axiológica de las personas con el mundo (Simmel), que convive con una relación cognitiva, y que ambas son distinguibles de manera analítica, pero que desde el punto de vista fenomenológico son más difíciles de separar. Esto lleva a la segunda clave que tiene que ver con la relación entre los valores y la crítica, en el sentido de dar cuenta de que la reflexividad de los sujetos implica que estos elaboren juicios sobre las personas y el mundo, y que esos juicios se plantean muchas veces en términos de bien y mal, es decir, en términos morales y de valores (Boltanski). La tercera clave tiene que ver con la idea de que dar cuenta de valores es dar cuenta de relaciones de reconocimiento (Honneth), de manera que es posible afirmar que el reconocimiento es reconocimiento de valores compartidos. La cuarta clave es distinguir, siguiendo el planteo de Nathalie Heinich, entre diferentes acepciones del concepto de valor, según la cual podemos hablar por un lado de objetos dotados de valor, y por otro de criterios según los cuales son valorados objetos, sujetos y estados del mundo. La quinta clave tiene que ver con relacionar la idea de valores con la de hegemonía (Laclau), de manera de entender los valores como espacio de disputa de diferentes grupos por hacer prevalecer determinada articulación de significados sobre significantes referentes a valores (tanto a principios de valor como libertad, igualdad, mérito, como a objetos dotados de valor como el trabajo, la familia o la nación). Esta propuesta se fundamenta en la pertinencia de un abordaje desde la sociología de los valores, para plantearse viejas preguntas tales como: ¿Qué es una buena vida y por qué no la tenemos? (Rosa), que remite al tema alienación-emancipación. A su vez sirve para acercarse a problemas actuales como la crisis climática, la relación con el ambiente, los debates feministas, las resignificaciones de la centralidad del trabajo, entre otros asuntos que dan cuenta del “cambio civilizatorio” que atraviesan nuestras sociedades.